Utilizar una lámpara de aceite de manera segura: 5 consejos

Utilizar una lámpara de aceite de manera segura: 5 consejos

El uso de lámparas de aceite es muy antiguo. Su origen se remonta a la civilización Griega, y está documentado en el Mediterráneo incluso entre los Fenicios o los Romanos, ya muchos siglos antes del nacimiento de Cristo.

En la antigüedad las lámparas de aceite eran platos, simples recipientes sin tapa y provistos de una boquilla en el borde, que contenía la mecha. El riesgo de quemaduras o incendio era notable por la falta de protección. Las lámparas de aceite modernas han sido modificadas en este sentido, dada la naturaleza altamente combustible del aceite, todavía es mejor seguir algunas precauciones.

  1. La primera astucia es no dejar nunca sin custodia la lámpara encendida, lo que significa que es recomendable apagarla cuando se sale de la casa o si se va a dormir, con el fin de evitar caídas accidentales o cualquier otro accidente. Por las mismas razones, y para garantizar las mejores condiciones para la lámpara, es siempre mejor no guardarla con el aceite en el tanque.
  2. La lámpara de aceite deberá ser colocada fuera del alcance de los niños y animales, que accidentalmente podrían golpearla y hacerla caer.
  3. Es mejor usar aceite blanco refinado (petróleo lampante), en lugar de los coloridos y perfumados. Este último arruinan la mecha.
  4. Antes de encender es necesario humedecer la mecha en el aceite. Las mechas mejores son las que se utilizaban antiguamente, cortadas y ligeramente redondeadas. El algodón utilizado en su composición absorbe el aceite por capilaridad, haciéndolo subir entre las fibras muy lentamente y dándole tiempo para calentarse.
  5. Se quita la tapa de la lámpara, se quita el quemador, en el que vamos a insertar la mecha, y se pone el aceite, que no deberá llenar en exceso la lámpara para evitar derrames. La mecha debe asegurar 1 o 2 cm de distancia entre la llama y el aceite. De hecho, si la llama llegará en contacto directo con el aceite en el tanque se quemaría todo. Al mismo tiempo, sin embargo, una distancia excesiva impediría al aceite de subir a lo largo de la mecha para asegurar la llama.