La antigua tradición de los iconos griegos pintados

La antigua tradición de los iconos griegos pintados

Con el término ‘icono’ se identifica una representación sagrada pintada sobre madera. De hecho, la palabra sería utilizable para cualquier imagen, independientemente de los materiales y técnicas de realización. Pero convencionalmente se incluyen en esta definición obras sobre tabla producidas dentro de la cultura bizantina y eslava. De hecho la palabra ‘icono’  deriva del ruso «икона», que a su vez deriva del griego antiguo εἰκών –όνος, del verbo eikénai, ‘ser similar’, ‘aparecer’. Otra derivación es de la palabra en griego bizantino eikóna, que se puede traducir como ‘imagen’.

Los iconos son obras que trascienden la materia y el simbolismo profundo de que están impregnados. Cada detalle, incluso el aparentemente más insignificante, expresa un concepto, que encarna un significado superior, una valiosa referencia a un episodio del evangelio, a un mensaje espiritual. El creador de iconos es más un escritor que un pintor, portador de una real misión teológica, antes que artística.

Las reglas que definen la realización de los iconos se incluyen en los manuales especiales, hermeneía, los cuales el iconografista debe seguir con precisión. Entre las diversas tradiciones y tipos de iconos, los de ámbito griego-bizantino son sin duda entre los más fascinantes.

A menudo se trata de iconos pintados en ambos lados, o compuestos en dípticos y trípticos para ser transportados fácilmente. Los iconos griegos son atribuibles a algunos temas recurrentes, y se caracteriza por elementos comunes.

Iconos de la Santísima Madre de Dios, dedicados a la veneración muy extendida en el mundo bizantino de la Santísima Madre de Dios (Yperaghia Theotòkos), en los cuales la Virgen se suele representar como Madre, con el el Hijo en sus brazos, adornada con una túnica y un manto (maforion) decorado con tres estrellas que simbolizan su virginidad imperecedera.

Iconos del Santísimo Salvador, en los cuales se representa a Jesús de la cintura para arriba con un libro en la mano izquierda y en el acto de bendecir con la mano derecha. Lleva una túnica oscura que recuerda a su naturaleza terrenal, y un manto azul que simboliza la divina.

Iconos melquitas, de Oriente Medio, con Cristo, los ángeles y los santos con la tez y las características árabes.

Iconos de las festividades móviles, dedicados a las festividades que no ocurren en una fecha fija en el calendario, pero que están relacionados con el ciclo de Pascua. Se dedican por lo general a la Pasión, la Muerte y Resurrección de Cristo.

Iconos de las festividades fijas, dedicados a las celebraciones fijas en el calendario litúrgico.