Crucifijo Vía Dolorosa bronce INRI colgable Vía Crucis 54 cm

Cruz de bronce de 54x36 cm realizada por el mismo taller que creó las estaciones en Tierra Santa en bronce y trabajó para el Vaticano.

Al caminar por el Vía Crucis en Jerusalén, se pueden apreciar las estaciones de la Vía Dolorosa creadas por este estudio con gran dedicación y gratitud.

Cristo, tras ser condenado a muerte por crucifixión, fue flagelado por los soldados. Luego le dieron la cruz para llevar su castigo, el instrumento de su muerte, a lo largo de aproximadamente un kilómetro en un camino empinado.

Una vez en el lugar, le clavaron los clavos en las manos y los pies y lo elevaron en la cruz. Después de horas bajo el ardiente sol y con sus heridas sangrando, exhaló su último aliento. Todo se oscureció a su alrededor y la tierra tembló como si incluso las fuerzas de la naturaleza estuvieran de luto por la muerte del Hijo de Dios. Enfrentó la muerte y la venció, salvando así las almas de toda la humanidad. La cruz se convirtió en un símbolo, un recordatorio y una oración a aquel que dio su vida para salvar a todos. Se convirtió en el gesto supremo de bondad y misericordia.

El recorrido se llama Vía Crucis o Vía Dolorosa, que parte de la Iglesia de la Flagelación, donde Cristo fue juzgado y flagelado, y llega a la Basílica del Santo Sepulcro.

Al adquirir este producto, estarás contribuyendo a la preservación del patrimonio de Jerusalén.

Las estaciones son elaboradas en Italia por artistas expertos.